Una Triple Corona para recordar
Después de que terminó el Belmont Stakes G1 el pasado sábado y pudimos ver a un potro que ha dominado a su generación como lo es Sovereignty (Into Mischief), es propicio recordar lo que fue la Triple Corona 2025, una tríada de carreras que se vivió de manera diferente por varias razones.
Una de ellas es que precisamente ese tercer paso fue en la misma distancia que el codiciado Kentucky Derby G1 (1 1/4 millas). El motivo de esto es bien conocido: Saratoga albergó durante 2024 y 2025 el Belmont Stakes G1 y ahora la carrera volverá a su escenario natural en Belmont Park, el año próximo.
Sovereignty, defensor de Godolphin, la más importante y poderosa cuadra de todo el mundo sin discusión alguna, nos regaló dos victorias épicas: la primera, compitiendo en la denominada “carrera de las rosas” contra diecinueve rivales, los cuales fue superando durante todo el recorrido de 2,000 metros, en una pista donde solo los grandes caballos como él, se mueven a placer.
Ese Kentucky Derby G1 en su edición 151, nos mostró la grandeza de un purasangre que fue eficientemente guiado por un jinete de alto calibre como lo es el venezolano Junior Alvarado y el entrenamiento de Bill Mott. La adaptación a la pista que tuvo, el superar no solo física sino psicologícamente a sus enemigos (aún cuando muchos no crean que los caballos también sufren golpes psicologicos cuando son derrotados) y dar a entender que es un dolor de cabeza para esos oponentes, fueron varios de los ítems que todavían se pueden recordar observando la repetición de la carrera una y otra vez.
Sin embargo, la historia de esta Triple Corona tiene sus bemoles. La decisión de no correr a Sovereignty en el Preakness Stakes G1 fue cuestionada. Mott resguardó a su ejemplar y sin titubear se lo llevó a Saratoga para comenzar los entrenamientos al Belmont Stakes G1. Por su parte, ese Preakness 150 nos dio otra emocionante escena: Journalism (Curlin) destacado potro basado en la Costa Oeste, fue víctima de una emboscada antes de entrar en la recta final. Librado de eso, siguió derecho en su accionar y pudo llegar a tiempo para la victoria.
La revancha apareció en el tapete: Journalism versus Sovereignty. Aún cuando los purasangres no sabían que era eso del “rematch” como se dice en inglés, cada uno en su establo llevaba el día a día. Los medios, promocionaron el posible enfrentamiento cual otroras grandes carteleras boxísticas, en la época donde los verdaderos pesos pesados (Alí, Frazier, Norton, Foreman) libraron batallas que paralizaban a países enteros.
Esta vez, dos pesos pesados del turf nortamericano no se fueron a los puños, pero si en la recta final tuvieron un combate férreo, donde Sovereignty, el cual esta vez sorprendió a muchos por la manera como se movió en la recta final de Saratoga, reinó entre los tresañeros.
Sin embargo, la dinámica de la humanidad en la actualidad está orientada más a lo negativo que lo positivo, y muestra de ello es que, en vez de alabar el entrenamiento de Mott para tener el caballo en el punto exacto de su condición física, críticas fueron y vinieron contra él cuestionando su decisión -y la de los dueños- de no correr al potro en el Preakness G1.
Entre los tantos resultados y números que dejó esta Triple Corona 2025, conseguimos lo siguiente: Sovereignty corrió solo dos peldaños y los ganó (primero y tercero), Journalism fue el único que estuvo anotado en las tres carreras, registrando balance de un primero (Preakness G1) y dos segundos. Junior Alvarado igualó a Javier Castellano y ahora son los dos únicos jinetes venezolanos que poseen en su haber la dupla de ser los únicos jockeys del país suramericano en ganar el Kentucky Derby y el Belmont Stakes en un mismo año. Por otra parte, Baeza (McKinzie), corrió dos veces y en las dos pruebas llegó tercero y para finalizar, en el primer y tercer paso, se repitió la Trifecta con los mismos ejemplares.
Otro dato que generó la Triple Corona 2025 tiene que ver con el entrenador que más pruebas de la tríada de competencias ha ganado en toda la historia: Bob Baffert, cuyo regreso al Kentucky Derby G1 este año fue todo un suceso, después de la suspensión que sufrió. Sin embargo, ese retorno no fue tan triunfante como se esperaba.
Desde 1999 cuando Baffert tuvo a sus presentados en las tres carreras y los mismos no estuvieron en los tres primeros puestos, por segunda oportunidad le sucedió lo mismo este año: Citizen Bull figuró décimo quinto en el Kentucky Derby G1, Goal Oriented cuarto en el Preakness G1 y Rodriguez también cuarto en el Belmont G1. Resulta llamativo que el único trainer que logró dos veces la Triple Corona en su poder durante este Siglo, no estuvo decidiendo ninguna de las tres competencias.
Hay tantas anécdotas y recuerdos en estas tres carreras, pero hay una que realmente queda en la historia si se puede decir de manera negativa y se trata de la famosa multa que recibió Junior Alvarado después de haber ganado el Kentucky Derby G1. Hasta el momento de redactar este artículo, no se ha conocido el resultado de la apelación que el látigo venezolano introdujo sobre este tema. Dicha multa que fue el 20% del premio que obtuvo, generó un amplio rechazo dentro del gremio de los látigos.
